Gestos

(Este título se parece a una contratapa de Gelman en Página/12 pero no hagan caso). Cuando veo el abrazo de Taiana con Ban Ki-Moon en el contexto más grande del conflicto por Malvinas me doy cuenta que la diplomacia es como ser invitado a comer filet a la casa un hermano grande y despiadado, que al final de la comida va a pedirte que laves los platos y dejes propina. Pienso además que la gente nunca va a dejar de abrazarse, ¿no? En la calle, dos enamorados se besan y se abrazan esperando el colectivo. En un living, dos amigos se chocan las manos y se dicen "Qué hacés"; después se abrazan. Los diplomáticos también lo hacen y en el fondo están contando la cantidad de aviones que tienen sus aliados. Cuando se hace diplomacia los abrazos deberían estar prohibidos. Es una idea que les tiro.

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